lunes, 26 de febrero de 2007

Seis noches de pasión en Viña

Programas faranduleros en doble jornada, discusiones vagas si la reina será una argentina con olor a quirófano o una cincuentona con sobre peso. Que el vestido de la Bolocco, que la Olivarí se separa o la bajada de vestido a todo Chile. Y vamos empañando la fiesta del verano, en donde todo se traslada del aburrido Santiago a la más glamorosa Viña de los últimos años.

Vamos desglosando...

La primera noche fue más bien tibia (a ratos fría). Abrió La Oreja de Van Gogh con una réplica del 2005. Bacilos en tanto, cerró su carrera de más de 10 años con más de lo mismo, se notó el poco fiatio en el trío. ¿Lo mejor? Mayumana.

La segunda jornada tuvo más movimiento. Comenzaba el tigre, 66 años, gran cantidad de humo en sus pulmones y una cantidad no menor de alcohol -del bueno- no disminuyen en nada ese vozarrón del galés que desde que entró tenía asegurado el máximo galardón. Varieté y Mario Guerrero quemaron tiempo para que la quinta recibiera pasada las 2 A.M a Los Bunkers, perjudicados por el reloj y cuando el público gritaba claramente el trofeo de ave para los penquistas, Tonka y Sergio se despidieron.

Viernes, el día más candente sin dudas. Los animadores pensaban que tenían al 'monstruo' en el bolsillo, pero no, pedía antorcha dorada y gaviota para Ana Torroja y el público le regaló puteadas y pifias por más de una hora, notable. Pero no todo fue negativo, Cerati recordó un par de tema de Soda y se quedó rápidamente con la segunda gaviota, todo un rockstar. Preadolescentes somnolientos esperaron el grandioso show de Kudai que se vistieron para ir a la blondie, la gaviota en otra ocasión.

Cuarta Noche, otro de los éxitos seguros, Los Tres apelando a sus conocidos temas y las polemicas de siempre que variaron de un discurso a un abrigo. Doble antorcha y la gaviota plateada para una de las mejores bandas nacionales. Álvaro Salas, el rey del chiste corto se enfrentaba al siempre difícil público en lo que respecta al humor. Con ayuda de Pujillai sacó risotadas. Fito Páez cerraba la velada, prestándose ropa con Álvaro Henriquez logró encantar y se llevó gaviota con tibios gritos.

El penúltimo día comenzaba con el apático Bryan Adams acompañado con uno que otro tongo logró encantar a la Quinta y se lleva gaviota a Ontario. 'Palta' Melendez conformó su rutina cargada al humor político y a las imitaciones, intercambió pifias por risas. Lucybell cerró y bien tarde, salieron a escena pasadas las 3 de la mañana, se le entregaron todos los galardones bien apuraditos, parece que los animadores tenían sueño.

con un fogoso Sexta Noche. Con un saco de ropa vino Ricky Martin, a base de éxitos de ayer y hoy coronó su participación como la más exitosa del festival, el público lo premió con dos gaviotas. Así el boriqua encumbra su éxito a lo hecho por Marco Antonio Solís y Raymond Ayala en año anteriores. La clausura del evento quedó en manos de Don Omar, el 'Judas' del reggeatonshow se quedó con los tres reconocimientos del público, finalizando así, la 48ª versión del Festival de Viña.

No seré un Passalacqua para ponerle nota ni criticaré frivolamente los seis días. Sólo espero que siga mejorando y que por favor los canales que no tienen la exclusividad dejen de tirar mierda al show más popular que tenemos en nuestra larga y angosta faja de tierra.

viernes, 16 de febrero de 2007

Transantiago, un mal necesario...

No es primera vez que el sistema de transporte en la capital cambia de manera algo radical.

En años pasados fuer el apogeo de las góndolas, luego las libres con recorrido tan populares como la "Matadero - Palma" o la "Recoleta - Lira" desaparecían el año 92 para dar paso a las famosas micros amarillas que intentaban dar al transporte capitalino un aire más de buses que de liebres. Pero el cambio no pasó desapercibido, al contrario, el caos también inundó la ciudad, la poca información y el cambió a las micros con números específico confundió a la población.

Década y media después la escena es parecida, pero los actores ahora son buses con pinta de modernidad europea, pero con fallas chilensis, con colores y categoría... linda la cuestión.

En un principio, el sistema comenzaría en octubre, pero no, la pobre planificación obligó a postergar la partida para el 10 de febrero día que probablemente sea recordado como un martes 13 para el gobierno.

Desde mucho antes las críticas eran varias: que las micros eran de segunda mano o eran amarillas pintarrajeadas albiverdes. La famosa tarjeta bip, todo un leseo. Paraderos destruidos meses antes del inicio (que este humilde servidor fue entrevistado sobre el tema en un canal privado) Tirones al por mayor en el interior del troncal. Un verdadero horno en época veraniega. Asientos demasiado altos para los que no gozan de zancos y hasta que Zamorano es la gran mufa de la revolución del transporte.

Optimistas piden tiempo para "afinar" detalles. Destacan la ayuda para los discapacitados, las numerosas cámaras de seguridad y el convenio con el Metro, por ahí, lo más destacable.

Es cierto que el TS en sí, es único en el mundo, pero el sistema se basó en gran parte por el "Transmilenio" un similar sistema de transporte opcional colombiano que cubre el 30% de Bogotá y que sólo el 20% de los usuarios de la locomoción colectiva prefieren. Casi siete años operando con un bajo éxito y que continúa provocando pugnas entre los tipos de transporte de la capital del país cafetero.

"Un mal necesario" ya que no nos queda otra que abrir el plano, sacar la tarjetita azul y viajar entre bus y bus de colores vivos. ¿los reclamos? a Zamorano.

Por Luis Aravena S.
IV Región.

viernes, 9 de febrero de 2007

Lo Publico v/s Lo Privado

No es un misterio que la mayoría de las empresas privadas entregan un mejor servicio a sus clientes.

Cada año aumenta más la brecha en la educación, por ejemplo. Para acceder la educación superior se necesita gozar de una mínima cantidad de Arturitos Prat en la billetera para poder pagar la Universidad y subsistir a la vez. Dejando sin poder estudiar a muchos hijos de gente que no goza de una amplia cantidad de cero en sus salarios.

En el sector salud esto es aún más abrumador. Casos que -muchas veces- son de riesgo vital se ven eternamente aplazados sólo por el hecho de no tener acceso a una mejor calidad de salud, teniendo que esperar más de un año para poder tener acceso a un pabellón y algo de anestesia para darle fin a una enfermedad que sólo tiene solución con cirugía.

Ayer estuve en un recinto hospitalario que "beneficia" a trabajadores que sufran lesiones o accidentes durante su realizan su labor. Le pregunto a un tipo con muletas si desea sentarse (él llevaba un implacable yeso que cubría su pierna) sin titubear me replicó "llevo esperando cinco horas parado, demás que aguanto esperando 10 minutos más" Notable.

En el sector particular, la escena es totalmente distinta. Allá, sólo se requiere de planificación a corto plazo, basta que el especialista haga un espacio -para no decir hueco- en su agenda y que haya disponible pabellón en algún recinto con el título "Clínica" en la fachada de sus lujosas instalaciones para ponerle fín a la aflicción.

No ganaré el Nobel por decir que con dinero se pueden hacer muchas cosas con milagrosa rapidez. Pero a veces, no se pide justicia para los más necesitados, sino solo una pizca de dignidad.

por Luis Aravena S.